Fin de gira del ‘7’ de Platero en La Riviera de Madrid
Viernes 23 y sábado 24 de Octubre de 1998 son las fechas de estos dos conciertos y, a continuación, mostramos lo que tenemos; un fotón de Iñaki Uoho, las dos entradas en tamaño pequeño y unas cuantas líneas sobre este cierre de gira. Ahí va.
✎ 23 de octubre de 1998. Texto: Fernando Iñiguez (El País)
Platero y Tú, doblete en La Riviera
No es fácil llenar La Riviera (3.000 espectadores; paseo Bajo Virgen del Puerto, s/n; metro Puerta del Ángel), pero el grupo bilbaíno Platero y Tú lo ha conseguido por partida doble. Su rock contundente y urbano, del que es buena muestra su último disco, 7, sonará ahí hoy y mañana (22.00 horas, 1.800 pesetas) después de haber arrasado en toda España y en el teatro Carlos Marx de La Habana.
✎ Noviembre de 1998. Texto: Juan Destroyer (Heavy Rock)
PLATERO Y TÚ. VIERNES 23 DE OCTUBRE DE 1998
POR MÍ… ¡QUE SIGAN ASÍ!
La próxima vez me tomaré las cosas con más calma, menuda carrera automovilística más inútil que me pegué por la M-30 esquivando a los conciudadanos que salían de la capital para pasar fuera el fin de semana y a aquellos que habitan en las llamadas ciudades-dormitorio que volvían a sus hogares después de otro día de curro, y todo esto pensando que llegaba tarde; en última instancia, a pesar de que estaba previsto que abrieran puertas hacia las 21h., los Platero no aparecieron por el escenario hasta bastante pasadas las 22h.
Justo en ese momento en el que daba inicio la actuación estaba yo pensando en el llenazo de la sala, que se repetiría al día siguiente, y mientras yo divagaba respecto a actual poder de convocatoria de los grupos nacionales, se apagaron las luces y comenzaron los de Bilbo con uno de los temas de 7, su último álbum, precisamente le tocó la envilecedora papeleta de dar inicio a la fiesta al tema de apertura del mismo, Por Mí. Se pudo comprobar que su última y séptima cosecha discográfica ha dado nuevos himnos para la fervorosa devoción que llevan a cabo sus miles de incondicionales fans, especialmente el single Alucinante, y la emotiva Al Cantar.
En cuanto al repaso que hicieron a sus más añejos rocanroles, pues se cayeron de la lista algunos de los que sí eran habituales en su anterior gira, como el ancestral Rompe Los Cristales, Tenemos Que Entrar o Me Dan Miedo Las Noches, pero como sí que tocaron otros como Ramón, Tras La Barra, Voy A Acabar Borracho, las aclamadas Mari Madalenas y El Roce De Tu Cuerpo, Somos Los Platero, Hay Poco Rock ´N Roll, con el consiguiente desfile de solos por parte de Iñaki, o la más pedida durante toda la actuación por la audiencia, que no es otra que Juliette, al final los presentes quedamos contentos y afónicos de berrear tanto estribillo conocido, algunos porque tienen los discos, otros muchos porque se las han estado pinchando hasta la saciedad en cualquiera de los garitos de ambiente rockero-nacional, esparcidos por las zonas de marcha de casi todo el territorio nacional (créame, señor propietario de bar, este tipo de locales funcionan bien).
En resumen, todo lo que suele ser un concierto de Platero, espectáculo sencillo y directo, sin grandes adornos, no se han comido la cabeza para enseñar algo nuevo o algo que no son, se han limitado a seguir con la fórmula de su anterior gira, la que acabó plasmándose en el doble directo A Pelo. Hasta el público estuvo en su sitio cuando le dio por corear «Fito se hace pajas» (perdón por la palabra malsonante) o «El que no bote policía nacional». Por cierto que a Iñaki le vi muy metido en su papel, algo menos comunicativo quizás pero demostrando que el hecho de que se haga sus pinitos con el Robe no quita para que siga atendiendo a los reclamos de la banda que le vio crecer. Con los Extremoduro todo queda entre amigos.
Pocas cosas son mejores que un concierto de Platero y Tú para comenzar una noche de viernes.
✎ 23 de octubre de 1998. Texto: Esteban Perez (Todas Las Novedades, link)
PLATERO Y TÚ EN MADRID
Todavía quedaba una fecha y la sala estaba a rebosar. Lo de Platero en Madrid ya parece más que consolidado. Tampoco es raro. No hay tantos grupos de rock’n’roll y r’n’b que se lo curren tan bien como los vascos y que, encima, tengan una carrera plagada de normalidad que facilite el contacto con su público. Esta gente saca discos con regularidad, se presenta en directo una vez al año y tiene ya un repertorio que hace que quien va a verlos rara vez salga defraudado.
En La Riviera no presentaron nada que no se esperara. De hecho, lo mejor que tienen los Platero es que siempre dan lo que el público quiere. Aunque se vean obligados a incorporar temas de su último disco (7 en este caso), el cuarteto cuida mucho eso de dar sus pildorazos habituales, esos temas que saben que levantan la sala y que ponen a botar a todo el personal. La gente (por lo menos la de Madrid) ya se ha hermanado con las guitarras de Iñaki y con la voz de Fito. Basta que ellos salgan a escena para que hierva el calor del rock’n’roll más excitante. La base rítmica en directo sigue mostrándose menos activa, menos participativa, pero no cabe duda de que sigue siendo igual de esencial que siempre. Sin ellos, piezas como Hay Poco Rock’n’Roll o Un Abecedario Sin Letras, por citar algunas, no tendrían esos arranques de ganas que despiertan entre un público que se entrega desde las primeras notas.
Una nota superagradable del concierto fue el cambio de sala. Platero era de las bandas que nos tenían acostumbrados a verlos en el antiguo Canciller. Ahora, en La Riviera, con más amplitud y mejor visibilidad, todo colabora para que un show de este tipo pueda disfrutarse mejor: las barras están más a mano, el ambiente no se condensa de la misma manera que antes y la gente no está tan abarrotada como en la desaparecida sala de San Blas. Por lo demás, sin novedad en el frente… rockero.
No shows, las luces normales y un sonido excelente que llegó a todas partes con nitidez. Ahora toca esperar a la siguiente, ya que Fito se embarcará en su nuevo proyecto (Fito y los Fitipaldis) e Iñaki se liará en la gira de Extremoduro. Los Platero han cumplido durante otro año y ahora les toca descansar como banda.